Soy tu lacaya
Un ser difuminado
Caminante cabizbaja
Siempre en el lugar de lo olvidado
Un triste espejismo de realidad
que se diluye entre la gente
Soy una marioneta llena de bondad
que grita que le despierten
Noble y leal estoy siempre dispuesta
a seguirte como tu esclava, como tu princesa
Y galopo siempre a tu vera
entre los rincones más oscuros
eres la llama de mi vela
y yo de ti lo más oculto
Soy el velo que te susurra que vives
la tinta de tus palabras
Soy la mancha de lo que te persigue
las huellas de lo que te atrapa.
Simón Vidal Ferrandis